EL DESCUELGUE DE ALERTA Y CONTROL
GANAR MENOS TODOS PARA PAGAR LA
INEPTITUD DE UNOS POCOS Y PARA SEGUIR MANTENIENDO SU TRAMPOSO MODELO DE
RECUPERACIÓN
Finalmente la ralea de intocables interpretadores y entusiastas creadores de la actual Reforma
Laboral, a través de un laudo indignante, pero vinculante y de aplicación
inmediata, han dado la razón a la empresa ALERTA Y CONTROL en su pretensión de
aplicar las medidas de ajustes que ellos consideran que salvaran a esta empresa
de esa crisis que dicen soportar y en la que los trabajadores, no solamente no
hemos participado sino que, además, otros, con decisiones contrarias al interés
general, nos han obligado a participar en las fracasadas soluciones que nos han
querido vender desde las sucesivas renegociaciones a la baja del Convenio Estatal.
No es el momento de repetir los argumentos que hemos venido señalando
durante todo el proceso de descuelgue, nuestras razones siguen vivas, por mucho
que desde la perversa realidad legal actual, se nos intente convencer de la
necesidad de hacer otro sacrificio inútil para conseguir dar viabilidad a un
una empresa que no quiere entender que no se nos pueden pedir más esfuerzos a
unos trabajadores que malvivimos, en la actual situación de este país, con un
salario medio de 980 euros mensuales.
Nuestra radical negativa a la firma de la rebaja salarial que la empresa
finalmente nos va a imponer, solamente ha servido para atrasar la aplicación de
la misma y para que los expertos de la Comisión Consultiva Nacional de
Convenios Colectivos- CCNCC, hicieran sus despiadados experimentos legales, sin
tener en cuenta, en absoluto, el contexto económico que en el que nos movemos
los trabajadores de este sector, y sin calcular el encadenamiento de efectos de
contagio que va a tener su decisión para todas las demás empresas del sector y
para la economía de las clases más desfavorecidas, a las cuales pertenecemos
mayoritariamente los vigilantes de seguridad.
Después de años de deterioro económico incesante de nuestras economías
familiares, siguen insistiendo en que la solución a nuestros problemas
laborales pasa por que asumamos que tenemos que ganar menos para que esos, que
nunca pierden, sigan proponiendo una salida torpe a la crisis que ya ha demostrado
que no sirve nada más que para crear más precariedad y más desigualdad.
Se contempla claramente en el
Laudo que la empresa que este se aplicará solamente desde la fecha de su
emisión (julio de 2014) y hasta que finalice la vigencia del Convenio actual
(diciembre 2014). Ya estamos preparando desde el SLS nuestras medidas de
reacciones propias y conjuntas con los demás sindicatos, medidas de las que ya
iremos informando pero que van a consistir en acciones legales y
reivindicativas que van a necesitar de un apoyo mayor y más contundente que el
que hemos venido haciendo hasta ahora. Ya no solo tenemos que enfrentarnos a la
sinrazón de esta empresa y los que les contratan, especialmente la Comunidad de
Madrid, ahora hay que demostrar nuestro rechazo a todos aquellos que desde la
Autoridad Laboral, certifican y legalizan, sin ningún escrúpulo, esta injusticia manifiesta con la que quieren
llevarnos a la precariedad más absoluta a todos los trabajadores de esta
empresa primero, y después a todos los demás compañeros del sector, compañeros
que ya están entendiendo que este descuelgue terminara por afectarles como no
seamos capaces de parar esta descarada agresión a nuestros derechos.
Esta contrariante realidad legal, no va a desanimarnos en la reivindicación
de nuestro salario, Tampoco nos
convencen las razones económicas que la empresa alega, sabemos muy bien cómo
funciona en este sector el sistema de recambio de empresas y esperamos que
ALERTA Y CONTROL abandone aquellos servicios donde nunca debería de haber
aceptado, en las condiciones que los asumió. No se puede aguantar más la
incompetencia de una empresa que se ha metido en unos problemas de cálculo y
mala gestión que ahora quieren que paguemos sus trabajadores.
Recordemos lo que supone este descuelgue para que sepamos lo que nos
estamos jugando:
-
La ampliación de la jornada laboral a
1826 horas anuales de trabajo efectivo en cómputo mensual a razón de 166 horas.
-
La supresión del permiso retribuido
de un día por asuntos propios.
-
La supresión de un día de vacaciones.
-
La supresión de la compensación
económica en supuestos de incapacidad temporal.
-
La congelación de la maduración de
quinquenios que dan derecho al abono del complemento de antigüedad.
-
La supresión de la paga de beneficios
de percepción en el año siguiente en la cuantía proporcional a la entrada en
vigor de la medida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario